El encuentro ante el Barcelona dejó malas noticias más allá del nivel paupérrimo del equipo y la goleada que recibió. Los de Pellegrini pudieron encajar un resultado histórico.
En la primera mitad, tras el primer gol del rival, Aitor Ruibal caía al suelo tras una jugada defensiva con Raphinha, que acabó en córner para el Barcelona.
El lateral bético tiene un esguince en el tobillo y será sometido a pruebas esta misma tarde. La realidad es que pinta bastante mal, pues incluso salió en muletas del estadio.
Las primeras estimaciones le colocan fuera de los terrenos de juego un tiempo por encima de los dos meses, ya que tendría un esguince bastante fuerte.
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