El Betis ha conocido este viernes su rival, en la próxima ronda de la Conference League. El equipo verdiblanco se medirá al Vitoriq de Guimaraes con el partido de ida en el Benito Villamarín.
El club ha comunicado en sus perfiles oficiales que cobrará un precio entre 10 y 30 euros para los abonados y soy béticos. El comunicado dicta de esta manera:
“Los abonados podrán activar su carnet por un precio que oscila entre los 10 euros -infantiles bonificados- y los 30 euros -adultos del primer anfiteatro de Preferencia-.
Desde esta misma tarde y hasta el próximo jueves 27 de febrero a las 14:00 horas se podrá activar a través de un enlace de pago que recibirán vía correo electrónico y SMS. Esto permitirá el acceso al Estadio con el abono y ocupar su asiento habitual.
Una vez expirado este plazo, el Club pondrá a la venta los asientos correspondientes a los abonos no activados.
En el caso de no activar el abono antes del plazo establecido, el abonado mantendrá su derecho de adquirir una entrada entre 10 y 30 euros, dependiendo la zona del Estadio y siempre sujeto a disponibilidad. Igualmente, cualquier abonado podrá utilizar su ID y PIN desde la taquilla online en la web oficial del Club. Podrá comprar dos entradas adicionales para dos acompañantes en cualquier asiento disponible del Estadio con un precio entre 20 y 35 euros”.
Una decisión que ha causado mucho revuelo en la afición, que piensa que, como ya pasó la temporada pasada, han abusado desde el club con los precios en una competición que ilusiona.