William Carvalho fue acusado de un delito de agresion sexual en el pasado mes de febrero. El jugador portugués fue a declarar y, posteriormente, puesto en libertad sin cargos. El juzgado ha comunicado este jueves que su caso ha sido archivado debido a la inexistencia de sospechas suficientes para un delito.
La magistrada expone que no se produjo ningún hecho que no fuera consentido. El jugador y la denunciante tuvieron un encuentro en un hotel de Sevilla. Se expone que no hubo obligación ni el portugués forzó ninguna situación que ocurrió.
Además, se recogen conversaciones posteriores al encuentro entre ambos, lo que la magistrada lo ve una prueba más de que no hubo ningún hecho inconsentido. “Al comprobar la falta de interés del investigado en volver a verla, le comunicó su malestar y decidió después, a su llegada a Ibiza, denunciar los hechos”, recoge la magistrada.