El Betis ya está disputando sus partidos de esta temporada en La Cartuja. El cuadro verdiblanco lleva a cabo la reforma del Benito Villamarín, que se encuentra aún en la fase de demolición.
A partir de comienzos del próximo año 2026 se espera que den comienzo las obras de la nueva grada de Preferencia y el unificar el resto del feudo heliopolitano.
Una situación que se podría alargar hasta las tres temporadas, por lo que el Betis podría estar en La Cartuja más tiempo de lo establecido en primera instancia por la entidad.
Cada temporada en el Olímpico le cuesta algo más de un millón de euros al Betis, aunque genera 10 millones de euros extra en cuanto a ingresos.
El coste total de las obras del Villamarín se sitúan en torno a los 200 millones de euros, que se esperan amortizar en los siguientes 10-12 años, tras la finalización del proyecto y con los ingresos adicionales que conllevará el Nuevo Villamarín.
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