Borja Iglesias fue uno de los nombres propios de la primera mitad de la temporada en el Betis, por su insuficiente rendimiento, con solamente dos goles en 18 partidos jugados, y después por su cesión en el mercado de invierno al Bayer Leverkusen.
El delantero gallego fue petición expresa de Xabi Alonso para sustituir a su delantero titular, Victor Boniface, que cayó lesionado a comienzos del mes de enero.
La realidad es que la participación del ‘Panda’ en el líder de la Bundesliga es prácticamente testimonial, siendo titular solamente en el primer partido, donde realizó los tres únicos remates que lleva en su andadura germana.
A partir de ahí, 66 minutos repartidos en cinco partidos. En total, ha tocado diez balones en área contraria y cuatro duelo aéreos. Unos números muy pobres, teniendo en cuenta que está en un equipo que no deja de atacar.
Tenían confianza puesta en él tanto el entrenador como la afición del club alemán, que no se fiaban de sus otros dos delanteros (Schick y Hlozek) y que ahora tampoco lo hacen de Borja Iglesias, ya que está aportando menos aún.
Lo peor para el gallego es que en tres semanas se espera la reaparición de Boniface, que hasta su lesión llevaba 16 goles en 23 partidos. Si todo sigue así, si ahora tiene pocas oportunidades, cuando vuelva el nigeriano tendrá menos.
Recordar que en el acuerdo de cesión el Leverkusen tiene guardada una opción de compra por el delantero gallego de 8 millones de euros. De seguir así, es difícil que la puedan ejecutar.