Betis y Leverkusen cerraron en la tarde del pasado miércoles la cesión con opción de compra no obligatoria de Borja Iglesias al club alemán, que abonará un millón y medio de euros por el préstamo.
Sin embargo, el delantero gallego ha vuelto a ejercitarse con el equipo en la mañana de este jueves, porque no se le dejará salir hasta que se cierre a su sustituto.
En esta decisión tiene todo el peso Manuel Pellegrini, quien ha solicitado a la cúpula verdiblanca y al jugador que no se produzca el movimiento hasta que no llegue el jugador que lo reemplace.
El técnico chileno no quería seguir perdiendo efectivos de cara al importante choque del próximo sábado en Mallorca y ha frenado la inminente marcha del Panda al equipo de Xabi Alonso.
Aún así, en el club trabajan en cerrar la necesaria incorporación en ataque para dejar marchar a Borja, algo que no cuadra del todo con las palabras que tuvo el CEO de la entidad, Ramón Alarcón, aludiendo a que la planificación estaba totalmente preparada, tras la salida de Ramón Planes.